Si crees que la pareja de tu ex trata mal a tu hijo, es fundamental tomar medidas para proteger el bienestar y la seguridad de tu hijo.
Hay que contrastar la información y ponerla en cuarentena antes de tomar medidas legales, pero también no restar importancia a lo que conozcamos, debiendo de buscar un equilibrio en la medida de lo posible.
A continuación, te brindo algunas recomendaciones sobre cómo abordar esta situación:
- Comunícate con tu hijo: Habla con tu hijo de manera abierta y receptiva. Anímalo a compartir sus sentimientos y experiencias contigo. Escucha atentamente y valida sus preocupaciones. Asegúrale que estás allí para apoyarlo y protegerlo.
- Documenta los incidentes: Mantén un registro detallado de los incidentes en los que tu hijo haya sido tratado mal por la pareja de tu ex. Incluye fechas, descripciones de los eventos, cualquier evidencia tangible (como fotografías o mensajes de texto) y cualquier testimonio de testigos si los hay. Esto te ayudará a tener una base sólida si necesitas tomar medidas legales en el futuro.
- Consulta con un profesional: Considera buscar la ayuda de un profesional, como un terapeuta infantil o un asesor escolar, que pueda evaluar y proporcionar apoyo emocional a tu hijo. También podrían ser testigos imparciales en relación a los problemas que tu hijo está enfrentando.
- Comunícate con el padre no custodio: Expresa tus preocupaciones y objeciones de manera clara y respetuosa a tu ex pareja. Comunícale tus inquietudes sobre cómo la pareja está tratando a tu hijo. Proporciona detalles específicos y solicita una acción inmediata para proteger a tu hijo.
- Consulta con un abogado: Si la situación persiste y crees que tu hijo está en peligro, es recomendable buscar asesoramiento legal de un abogado especializado en derecho de familia. El abogado podrá guiarte sobre los pasos legales que puedes tomar para proteger los intereses de tu hijo y explorar opciones como la modificación del acuerdo de custodia o la obtención de una orden de protección.
- Denuncia a las autoridades competentes: Si consideras que tu hijo está en peligro inmediato o enfrenta abuso físico, emocional o sexual, es importante informar a las autoridades competentes. Ponte en contacto con la agencia local de servicios sociales o la policía para informar la situación y solicitar su intervención.
Recuerda que la seguridad y el bienestar de tu hijo son primordiales.